La hemorragia cerebral espontánea: “¿habrá algo debajo?”

Resumen

Objetivo docente   Manifestar la relevancia clínica de la hemorragia cerebral espontánea. Describir las diferentes características radiológicas y complicaciones asociadas que pueden presentar. Describir las principales etiologías causantes de hemorragia cerebral espontánea, así como de sus hallazgos radiológicos en las diferentes pruebas de imagen. Proponer un algoritmo diagnóstico que optimice la detección del agente causal en la hemorragia cerebral espontánea. Revisión del tema La hemorragia cerebral espontánea, no traumática o “infarto hemorrágico” es una importante causa de morbimortalidad en todo el mundo. De hecho, pese a que los infartos hemorrágicos son significativamente menos frecuentes que los isquémicos, se asocian a mayor pérdida de años de vida ajustados a calidad de vida debido a su peor diagnóstico y a la disponibilidad de menos tratamientos. En función de su etiología, las hemorragias cerebrales espontáneas pueden producirse de forma primaria (por hipertensión o angiopatía amiloide) o secundaria a múltiples patologías. La adecuada caracterización de la causa de la hemorragia cerebral espontánea es de gran importancia, pues de ello depende su manejo terapéutico. Existen diferentes técnicas de imagen (fundamentalmente TC, RM y Angiografía por ASD) que empleadas de forma adecuadamente combinada, permiten diagnosticar la cronología de la hemorragia y el tipo de lesión causal si existiese en un alto porcentaje de los casos. Conclusiones Debido a la enorme relevancia clínica de esta patología, el radiólogo debe estar capacitado para realizar un adecuado diagnóstico y caracterizar con la máxima sensibilidad posible sus posibles agentes causales subyacentes.